Espai Curiós: Alcoy, la magia de una Navidad centenaria

Alcoy se consolida cada año como uno de los destinos más emblemáticos para vivir la magia de la Navidad. La ciudad ofrece un patrimonio cultural único y unas tradiciones centenarias que se transmiten de generación en generación. Entre los rituales más singulares destaca el Belén de Tirisiti, con más de 100 años de historia, y la Cabalgata de Reyes, considerada la más antigua de España y, posiblemente, del mundo, que tendrá lugar el lunes 5 de enero de 2026 y se prevé multitudinaria.

¿Qué hace diferente la Navidad Alcoyana?:

• Campanadas con aceitunas en la Plaza de España: el 31 de diciembre, a las 12 del mediodía, centenares de personas se reúnen en el corazón de la ciudad para comer doce aceitunas de Serpis al ritmo del reloj. A la medianoche, se repiten las campanadas tradicionales con uvas.

• Trenecito turístico: recorre el centro y explica a las personas más pequeñas las tradiciones navideñas, convirtiéndose en una “clase viva” de patrimonio.

• El Bando Real: acto en que los pajes recogen las cartas de la infancia con la burrita, preparando la llegada de los Reyes Magos.

• Cartel y encendido de luces: cada año, la fachada del consistorio se transforma con el cartel oficial de la Cabalgata, marcando el inicio de la Navidad.

• "Les Pastoretes": desfile infantil que abre el calendario navideño, con niñas y niños

vestidos de pastores y música tradicional.

• Campamento Real en el Preventorio: el 4 de enero, la ciudad se transforma en escenario mágico donde los pajes muestran a la infancia como preparan los regalos para los Reyes. Es una visita guiada llena de fantasía que conecta directamente con la Cabalgata.

• Los pajes en la Cabalgata: Suben por escalas rojas hasta los balcones para entregar regalos directamente en las casas, un gesto único de Alcoy que sorprende cada año a pequeños y grandes.

• Mercado de Navidad: artesanía local, productos típicos y ambiente musical en el centro histórico.

La Navidad Alcoyana es un relato que no necesita novedades para ser memorable. Cada detalle —una aceituna compartida en la plaza, un trenecito que cuenta historias, una fachada iluminada o unos pajes que bajan con escaleras— es una llave que abre memorias colectivas y hace de Alcoy una ciudad que, en Navidad, se reconoce y se cuenta a sí misma.

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